Ofrecemos a nuestros clientes servicios de poda de encinas y alcornoques en sus diversas variantes:
- Podas de formación, cuyo objetivo es guiar el crecimiento de árbol y que suelen realizarse una única vez.
- Podas de mantenimiento, practicadas en periodos de hasta 10 años, para eliminación de ramas en la zona central y copa del árbol, con una intensidad recomendad no superior a un tercio del follaje.
- Podas sanitarias, destinadas a mantener la salud del árbol, eliminando partes enfermas o dañadas, cuyo objetivo es alargar su vida lo máximo posible. Se practican principalmente para evitar la expansión de “la seca”. También podemos incluir en este tipo de trabajos las podas de seguridad que pretenden evitar peligros derivados de posibles desprendimientos en zonas dañadas del árbol.
Nuestro objetivo es ofrecer un servicio de calidad en el que prime el mantenimiento de la dehesa o cualquier tipo de arboleda, posibilitando así la continuación de las actividades económicas que el cliente venía desarrollando con anterioridad. La poda de encinas o alcornoques deben estar destinadas principalmente a su mantenimiento.
Existe una gran actividad económica asociada al mantenimiento de los bosques o dehesas, como son ganadería, caza, corcho, setas, miel, turísmo o aprovechamiento de su mantenimiento, como pueda ser la leña, carbón o biomasa, lo que hace aún mas importante la correcta realización de los trabajos de poda de encinas u otros arboles.
Todos estos trabajo se desarrollan acorde a la normativa vigente, con todos los permisos necesarios para su realización.